lunes, 28 de mayo de 2012

La vida y la muerte. Nada.

   ¡Hola a todos! Antes de nada quiero disculparme por no haber actualizado este viernes, entre la fiesta pos-bachillerato y el agobio pre-selectividad estuve algo liado, pero prometo que intentaré seguir publicando algo nuevo todos los lunes y viernes.
   En segundo lugar, comentaros que estoy contentísimo porque me han dado el primer premio de narrativa en gallego en mi instituto, al cual presenté un texto que combinaba los relatos de La constante y El experimento, ambos traducidos al gallego. Como es algo largo, no puedo publicarlo aquí, pero intentaré colgarlo como un archivo en red para que podáis leerlo.
   Por último, deseadme suerte con la selectividad, que ya queda poco y me he presentado a Literatura Universal sin haberla cursado en bachillerato. Eso sí, al menos estudiar a Shakespeare y a Mary Shelley me da bastante placer intelectual. Os recomiendo una mañana al sol en la alameda de Santiago de Compostela leyendo sobre la autora de Frankenstein, es bastante agradable.
   La pintura que incluyo es La noche estrellada, de Van Gogh. Sin duda uno de mis cuadros favoritos. Disfrutad de la lectura ;)



Sin nada que hacer, que sentir, que pensar, que soñar, que mirar, que querer, que reír.
Sin nada que decir, que escribir, que gritar, que cantar, que dibujar.
Sin nada que bailar.
Nada.
La vida no siempre es el final de Los Otros o el sueño de Von Aschenbach.
La vida no siempre es el estribillo de Creep o un cuadro de Van Gogh.
La vida no siempre es la vida de Christopher Isherwood.
La vida no siempre es una noche estrellada.
La vida no siempre eres tú, ni soy yo, ni mucho menos nosotros.
La vida es poesía en las manos de un ciego, es Max Estrella y su cuerpo muerto de bohemia y frío en la
noche madrileña.
La vida es gritar y no producir ningún sonido. La vida es querer y recibir un disparo. La vida es una hoguera      de libros, un disco rayado y una jauría de perros sumisos.
La vida es un reloj de bolsillo que te recuerda que queda menos y menos y menos y menos.
La vida es la telonera de la muerte.
La muerte es un puñado de naranjas en la pantalla.
La muerte es espectáculo en una plaza de toros.


"La vida es una historia 
contada por un necio, llena de ruido y furia,
que nada significa".
(William Shakespeare)


Sebastián Blanco Portals

lunes, 21 de mayo de 2012

A orillas del río se piensa mejor.


   Traigo hoy un poema con un aire bastante diferente a lo que he escrito hasta ahora. Quizás lo más prosaico y reivindicativo que se me pueda atribuir, no estoy muy seguro. Algunos de los temas tratados en el son más que sonados actualmente. Con otros como las alusiones a la venta de El grito, las bailarinas o el ya comentado suicidio de Virginia Woolf, he querido dar un toque más personal al poema.
   La pintura incluida, como no, es la obra maestra del Expresionismo El grito, de Edvard Munch. Me habría gustado utilizar alguno de los cuadros de bailarinas de Degas, pero creo que el de Munch era ineludible en esta ocasión. Prometo traer uno de los de ballet en las próximas actualizaciones.
   Disfrutad de la lectura :)


A orillas del río se piensa mejor.
O al menos, más.
Analizando el mundo olí el aliento de la muerte
La hipocresía y la decadencia.
¡Qué hipócrita soy yo, que aquí sigo entre papeles inocuos!
Tampoco llamaría depresión a este sentimiento que me embriaga
Sino nostalgia
Frustración
Impotencia
Vacío.
Es una bailarina con todas las uñas rotas
Que sigue bailando.
Es un dolor que disimulas hasta que no puedes más
Y rompes a llorar.
Es la cultura ninguneada.
Es el nazismo en el poder.
Es la generación mejor preparada comiendo estiércol.
Es El grito de Munch vendido a un multimillonario de mierda.
Pienso en el tiempo perdido
Y el tiempo que queda por aguantar
Y se me clavan las agujas del reloj en las vértebras.
Podría coger un puñado de piedras
Y llenar mis bolsillos
Y lanzarme a la corriente como hizo Virginia Woolf.
Pero yo no estoy loco
Ni soy tan cobarde
Ni soy tan valiente.


"La muchedumbre de martillo, de violín o de nube,
ha de gritar aunque le estrellen los sesos en el muro"
(Federico García Lorca)


Sebastián Blanco Portals


martes, 15 de mayo de 2012

La duda.

   Hola de nuevo a todos. Os traigo hoy un poema bastante personal, con el que creo que muchas personas pueden sentirse identificadas. ¿Pues quién no ha pensado alguna vez algo que después no ha hecho, y se ha arrepentido de la inactuación? ¿O simplemente de la falta de velocidad de reacción? Supongo que a todos nos fastidia no aprovechar oportunidades que vemos con total claridad una vez pasado el momento decidido. 
   Por todo esto, carpe diem.
   El cuadro incluido en esta ocasión es Miranda, del ya reiterado en el blog John William Waterhouse.  Espero que lo disfrutéis :)

Yo
Que tengo entre mis dedos la posibilidad de tocarte
Me enredo entre suspiros y pasos atrás
Me ahogo en mi indecisión
Me pierdo en el tic-tac y no hago nada.
No son complejos ni es miedo
Simplemente la duda del quizás
Y el qué dirán
Y el qué dirás tú también.
Un sinfín de búhos revolotean en mi cráneo
Y chocan contra las paredes:
Caóticas ideas de las mil cosas que haría contigo.
Entonces me decido y me giro
Y ya es tarde, te has ido.


Nuestras dudas son traidores 
que muchas veces nos hacen perder el bien 
que podríamos ganar si no temiéramos buscarlo.
(William Shakespeare)

Sebastián Blanco Portals

lunes, 7 de mayo de 2012

Palabras para Ofelia.


   Como os había prometido, actualizo hoy con uno de los poemas que leí en el recital del Soul & Sombra con los chicos de De los 90 al extrarradio. Estos versos tienen pretensión de reivindicar la individualidad que tan difícil de encontrar parece en un mundo que se ahoga entre modas y globalización. 
   La pintura de hoy es El nacimiento del hombre nuevo, de Dalí. Espero que lo disfrutéis :)


Las mismas caras siempre
Demacradas
Que me miran reprochándome su monotonía.
La misma expresión hiriente
Cínica.               
Este repugnante estatismo degrada mi alrededor.
Nada cambia, continúan reprimiendo mis impulsos.
Temen el peligro.
Temen la diferencia.
Temen la libertad.
Escribo para evadirme de esta vida que me oprime
Que me ata
Que me encadena y me condiciona.
Escribo para todos y para nadie.
Para mí.
Palabras vacías, palabras para Ofelia que las toma con sus delicadas manos y se las lleva con ella a morir a las aguas pútridas, y con ellas muere también mi ataque a este maldito mundo.
Y nadie quiere darse cuenta.
No os dais cuenta de que estas palabras ya no son mías, son de todos.
Detrás del vacío hay algo.
Las ignoramos, les escupimos, las dejamos morir.
¡Levantaos de una vez y gritad por vuestro derecho a ser personas!
Deposito mi esperanza en el cambio.
Creo ciegamente- o quizás no tanto- en que lo lograremos.
Pero, mientras tanto, escribo para mí: palabras vacías, palabras para Ofelia.


"Si una bala atraviesa mi cerebro, 
dejen que esa bala destruya las puertas de todos los armarios" 
(Harvey Milk)


Sebastián Blanco Portals

viernes, 4 de mayo de 2012

Nada paga a pena.

Caótico cerebro, disculpad el sinsentido. De nuevo la traducción al castellano va después de la imagen, que en esta ocasión es un cuadro de Bruegel: El triunfo de La Muerte.
Como comenté el lunes pasado, este miércoles fue el recital en el bar Soul & Sombra, y he de decir que ha resultado un éxito :) Los dos poemas que leí están todavía archivados sin subir al blog, pero prometo que pronto actualizaré con ellos. Espero que después de los buenos resultados podamos repetir esta experiencia en otros sitios (¡algo me ha llegado de que ya hay nuevas ofertas!). Espero que disfrutéis del poema, hoy no me siento muy católico para escribir nada más de introducción.


“Nada paga a pena” penso eu
E apareces ti para disipar todo razoamento casual.
Ti, feixe de sendas escuras e incognoscibles
Emoción
Imposibles xiros da miña mente
Misterio cuberto de flores e tenrura
Silencio colmado de vocábulos transcendentais
Arrepío que gabea polas costas
Sobredose de violíns e decibelios: Inverno de Vivaldi
Ovos que escachan contra as paredes
Pintura vertida nos ollos
Tempestade no cerebro, ondas no abdome
Coitelo afiado que racha o corazón
Miradas, sorrisos
Fazulas vermellas
Dentes que aparecen, que me sinalan
Beizos que me cravan contra a parede
Pracer impagable da túa presenza
Dor indicible da túa presenza
Contradición
“Si paga a pena, claro que paga a pena”
E me deixas tirado unha vez máis.






Traducción al castellano: 


“Nada vale la pena” pienso yo

Y apareces tú para disipar todo razonamiento casual.
Tú, eje de sendas oscuras e incognoscibles
Emoción
Imposibles giros de mi mente
Misterio cubierto de flores y ternura
Silencio colmado de vocablos trascendentales
Escalofrío que trepa por la espalda
Sobredosis de violines y decibelios: Invierno de Vivaldi
Huevos que escachan contra las paredes
Pintura vertida en los ojos
Tempestad en el cerebro, olas en el abdomen
Cuchillo afilado que raja el corazón
Miradas, sonrisas
Pómulos rojos
Dientes que aparecen y me señalan
Labios que me clavan contra la pared
Placer impagable de tu presencia
Dolor indecible de tu presencia
Contradicción
“Sí vale la pena, claro que vale la pena”
Y me dejas tirado una vez más.





La vida es como un cuento relatado por un idiota. 
Lleno de palabrería y frenesí, 
que no tiene ningún sentido. 
(Shakespeare)


Sebastián Blanco Portals